LA CULTURA DEL VINO


El cultivo del vino ha dejado una profunda huella en el territorio de la Denominación de Origen Rías Baixas y en el modo de vida de sus gentes.

La tradición cuenta que una de las variedades más arraigadas en esta Denominación de Origen, el Albariño, fue traída por unos monjes cistercienses al monasterio de Armenteira (Meis) en el siglo XII. Lo cierto es que esta variedad ha evolucionado y se ha adaptado tan intensamente a esta zona, que en ningún otro lugar del mundo adquiere la calidad que consigue en la Denominación de Origen Rías Baixas.

Y de igual forma que “el vino” se ha adaptado a esta zona, esta zona se ha adaptado al vino… Algunas de las referencias más significativas las podemos encontrar en sus fiestas y tradiciones, así como en su gastronomía y patrimonio inmueble.